jueves, 30 de diciembre de 2010

Bizcocho de chocolate con Fécula de Patata. Recetas sin harina, sin gluten y sin leche I

Otra de bizcochos. Será que ahora en Navidad hay más tiempo, o que estoy más experimentadora. Por fin encontré fécula de patata en un herbolario (marca Santiveri) y harina de soja. Empecé con los experimentos por la primera; cuando haga algo con la de soja os lo contaré.

Este está bastante más bueno que el anterior. Hay tres variantes, de naranja, de chocolate, o de chocolate y naranja (personalmente me gusta mucho más este último)

Ingredientes:

-2 ó 3 huevos (depende del tamaño)

-100 g de azúcar

-75 g de almendra rallada

-75 g de coco rallado

-50 g de fécula de patata (yo la compré en el herbolario, y es de marca Santiveri)

-Cacao en polvo (en su caso)

-50 ml de leche de almendras

-1 mandarina confitada o media naranja confitada, en pedacitos.

-2 sobres de gasificante (yo usé Mercadona, que trae de acidulante también)

Si quieres un bizcocho más grande, puedes aumentar todas las cantidades al doble, pero usando hasta 5 huevos.

1. Separar las claras y las yemas. Batir las yemas con el azúcar hasta que quede esponjoso.

2. Añadir:

-la leche de almendras

-la almendra rallada

-el coco rallado

-el cacao (en su caso)

-los trocitos de naranja confitada

3. Mezclar el gasificante con la fécula a parte y luego añadir a la masa.

4. Montar la claras a punto de nieve y mezclarla con la masa con movimientos envolventes, para que no se bajen.

5. Verter sobre el molde previamente engrasado y meter en el horno a 180ºC 30 min.

6. Pinchar con un cuchillo. Si sale limpio, apagar en horno aunque no haya llegado a los 30 min y dejar que se termine de hacer con el calor residual.

7. Desmoldar y adornar con azúcar glas.

8. ¡Disfrutad con el peaso de bizcocho que habéis hecho!

Sinceramente, me gusta mucho más lo esponjoso que queda este bizcocho. El de harina de arroz parece más un cake, un poco más tieso.

Consejos de conservación: Tras un día al aire (cubierto con un trapo por ejemplo para que suelte algo de humedad y no se enmohezca) se puede conservar en un taper a temperatura ambiente, llegando a durar una semana o más... si no os lo coméis antes!

miércoles, 29 de diciembre de 2010

Sustitutos del Colacao

Todos los que me rodeaban me decían que el cacao en polvo no era lo mismo que el colacao, que eso no iba a quedar bien, etc... pero el que inventa experimenta. Compré cacao en polvo puro de marca Carrefour, bastante bien de precio, y sin nada mas que cacao en sus ingredientes, lo mezclé con la leche de almendras y un par de cucharadas de azúcar y ¡Conseguido! Puedo desayunar caliente todos los días algo dulcecito (ya que no me gusta el té, ni soporto el Nesquik)

Otros cacaos que podemos usar, sin harinas ni almidones, son el de Intermón Oxfam (también en Carrefour) y alguno de Valor (pero mirad bien la etiqueta de este último, porque hay varios, y solo uno que podamos tomar)

Y por supuesto, cualquiera de estos cacaos los podemos usar para repostería, tartas, magdalenas, bizcochos...

ACTUALIZACIÓN:
Llevo ya casi un año usando un sustituto mejor del colacao: el chocolate a la taza Nestlé Gold, que ya lleva azúcar en su punto. Con leche de arroz queda estupendo, y el sabor a chocolate es mucho más suave.

domingo, 26 de diciembre de 2010

Bizcocho de chocolate con Harina de Arroz - Recetas sin maiz, sin gluten y sin leche



Ingrdientes:

-125 g DE ALMENDRA RALLADA
-125-150 g DE AZÚCAR
-60 g DE HARINA DE ARROZ
-2 HUEVOS GRANDES
-Un poco de LECHE (de almendras, de avellanas, de arroz o de soja, la que queramos o podamos tomar)
-CACAO EN POLVO (AL GUSTO, HASTA QUE TENGA COLOR CHOCOLATE) yo he usado Cacao en Polvo Carrefour selection, pero vale cualquiera que podamos tomar, como Valor o Intermón.
-2 SOBRES DE GASIFICANTE Mercadona (para que quede más esponjoso, ya que la harina de arroz tiende a apelmazarse)
-ACEITE PARA ENGRASAR EL MOLDE (particularmente soy partidaria de sustituir la margarina por el aceite siempre que se pueda)

Preparación:

1. Batir las yemas con el azúcar hasta que quede esponjoso.
2. Añadir la mitad de la harina mezclada con el gasificante, un poco de leche hasta que acepte el resto y las almendras. Mezclar hasta conseguir una masa homogénea.
4. Batir las claras a punto de nieve e incorporar rápidamente para que no se baje.
5. Agregar el cacao con movimientos suaves para que no se baje, hasta que tenga un color chocolate intenso.
6. Verter sobre el molde previamente engrasado y meter en el horno a 180ºC 30 min.
7. Pinchar con un cuchillo. si sale limpio, apagar en horno aunque no haya llegado a los 30 min y dejar que se termine de hacer con el calor residual.
8. Desmoldar y adornar con azúcar glas.
9. ¡Disfrutad con el dulce!


Actualización: Si se añaden 20g de almidón dulce de mandioca y un poco más de líquido se consigue que no se desmigue tanto

miércoles, 22 de diciembre de 2010

HANA. Diario de una Histaminósica perdía. Restaurantes.



Al fin un atisbo de luz.

Desde que soy consciente de que tengo un problema con la comida, una de las cosas que más pánico me daba era salir a comer con los amigos, con mi familia, incluso con Mugen. No quería comer fuera de casa. Me ponía nerviosa incluso. Cuando no ha quedado más remedio, por ejemplo por temas de trabajo, (en la mini-gira de hace tres semanas, cuando estuvimos actuando por los pueblos con el COEX, que nos daban de comer en un restaurante) terminaba deprimida. En Zafra tuve que pedir tres veces la ensalada, las dos primeras llevaba trocitos diminutos de atún, como si se lo hubieran espulgado, y se negaron a reconocer que iba mezclado con la zanahoria y que se lo habían quitado a mano. Incluso, una camarera sabihonda me dijo que ella sabía mucho de eso, que su hijo también tenía alergias alimentarias:

-¿Pero es que no llevas el Polaramine encima?

Ha sido una de las reacciones que peor me han hecho sentir. ¿Por qué no te tiras de una ventana? Si las piernas rotas luego se curan... Dos meses de escayola y listo... ¡No te jode!

¿No es mejor evitar tener una crisis que tratarla, y ni si quiera se sabe si con éxito?

Entonces decidí echarme a la poca vergüenza y empecé a llevarme tapers con mi comida a estos sitios, o para comer en la Universidad. Pero es mucho trabajo, y a veces te miran mal en los bares... Por no hablar de los días que llegas casi a media noche, y tienes que prepararte algo para el día siguiente... Es un rollo, y no siempre te puedes llevar fuera lo que te toca en el menú, sobre todo si son platos calientes y no tienes a mano un micro.

Por todo esto, me había hecho a la idea de que se habían acabado las cenas sociales para mí. No volvería a comer fuera de casa con mis compis de departamento, o con la gente del coro, a salir de tapas, o a ir a comer con mi familia (con lo que nos gustaba salir a comer a Portugal... era casi una tradición). Porque comer arroz blanco con pollo (por muy rico que esté) no es lo mismo cuando todos comen lo mismo que cuando los demás se están zampando un plato de bacalao dorao o de espaguetis a la carbonara.

Cuando María, la chica que estaba organizando la cena de este año del COEX, me preguntó si iba, levanté la mano sin pensar. Hacía tiempo que no veía a mis compañeros y me apetecía ir, siempre nos lo pasamos genial. Luego, cuando me di cuenta de mi error, fui a hablar con María. Tras intercambiar emailes con la información reglamentaria de mi alergia y el menú que nos iban a preparar, para ver qué se podía hacer, decidimos que yo hablara personalmente con el cocinero por teléfono.

-Cocinero: ¿Y no puedes tomar entonces nada de eso? ¡Cuántas cosas! -reacción esperada-. ¡No puedes comer casi ná!
-Cota-k: No, nada de eso puede estar en mi menú. Si creee que es demasaido difícil, lo comprenderé, no se preocupe -yo ya tiraba por lo negativo-.
-Cocinero: ¿Entonces si te pongo un poco de lomo y de ibéricos?
-Cota-k:
No, lo siento, eso suele llevar lactosa.
-Cocinero: Bueno, pues ayúdame un poco... ¿De entrantes qué sueles tomar?
-Cota-k:
No suelo tomar nada... ¡ya no voy de tapas!
-Cocinero:
Bueno, tranquila. Ya encotnraremos algo.


Tras quince minutos de propuestas fallidas, conseguimos acordar un menú aceptable, especial y que valiese los 25 euros que me iba a cobrar:

-De entrantes, jamón ibérico, gambas y langostinos cocidos.
-De primero, un plato de boletus a la plancha con jamón ibérico.
-De segundo, secreto ibérico a la parrilla con acompañamiento de parrillada de verduras y setas.

Cocinero: Madre mía, qué cantidad de cosas no puedes tomar. ¡Ya tengo ganas de conocerte!
Cota-k: Ya, bueno, a mucha gente le sorprende, pero claro...
Cocinero: Bueno, no sólo por eso; también tienes una voz muy bonita...! (O_0)

Aun así, no iba muy convencida del resultado final... no es por nada, pero hasta ahora, nunca me han hecho caso a la hora de pedir la comida en un restaurante. Y no es muy difícil: si no puedo tomar ensalada con tomate, ¡tampoco lo puedo tomar en la parrillada!

En Egipto, hace un mes, tuve una discusión increíble con el encargado del Hotel Luna Sharm, en Sharm el Sheikh, porque cuando le dije que no iba a comer, me preguntó que por qué, y me aseguró que me traerían lo que yo pidiera. Le di una lista con los alimentos en inglés, y le dije lo más importante también de palabra. Puede ser que insistiera mucho en que no hubiera tomate, ni harina, ni queso en mi comida (el hombre se fue cuando le empecé a repetir lo que no podía comer, diciendo "yes, yes, ok, I know..." con cara de que estaba siendo demasiado pesada, e incluso mis amigos me dieron que podía ser que se hubiera molestado) pero el resultado final me dio la razón.

Me había quedado corta con las advertencias (y eso que muchas veces exagero un poco para que tengan en cuenta mis indicaciones, diciendo que si no me hacen caso, y como lo que no debo, puedo terminar en el hospital; en el Cairo tuve que hacer eso siempre, y creo que es una buena recomendación, incluso sin salir de España): Me trajeron un filete de pollo a la parrilla, con acompañamiento de verduras a la parrilla también. En principio, me fié y como no vi nada sospechoso, empecé a comer. Estaba delicioso. Pero cuando llevaba la mitad, descubrí un trocito rojo en mi filete. Pregunté al camarero al descubrir que había trocitos infinitesimales de tomate asado en mi comida (en la parrillada había más, es como si hubieran quitado el tomate después de que lo hubieran hecho) y me confirmó que, efectivamente, era tomate.

No sé lo que me entró cuando me lo dijo. Pero lo cierto es que fui capaz de echarle una bronca de muy señor mío con un cabreo que hasta mis amigos se asustaron. Y no sé cómo fui capaz de hacerlo todo en inglés, que es lo que más me sorprende, porque no controlo tanto. Pero en ese momento me di cuenta de que no me puedo fiar nada más de lo que yo compre y prepare.

Y a pesar de todo, el hombre me cobró el filete. >`_´< style="text-align: justify;">Pero volvamos a la cena del COEX. Al llegar al restaurante, el cocinero vino a buscarme, no tuve que ir a recordarle que había alguien con menú especial. Y ese fue el primer detalle que me gustó. Me consideró alguien a tener en cuenta, y no una estorbo que no hacía más que dar la vara (que era como me sentía cada vez que intentaba comer en algún sitio fuera de mi casa...). Vino a confirmar mi menú y los ingredientes que lo componían para ver si todo estaba en orden, y todos los camareros de la sala estaban informados. Además, cuando le pedí si me podía pasar un poco más el secreto, me trajeron una piedra volcánica caliente, para que me la hiciera a mi gusto (y de paso me asegurara de que estaba limpia y no había restos de otras cosas... como sí que podría haber en la plancha) Era la primera vez que me sentía bien tratada por tener mi alergia, y no un despojo, un incordio que no hacía más que protestar...



Para información de todos, este restaurante es Doña Purita, en el Hotel San Marcos, en Badajoz. No suelo hacer publicidad, pero me siento agradecida...! ¡Gracias!

Quizás no todos los cocineros estén en el mismo saco. Quizás todos los restaurantes tampoco. Pero lo que está claro es que las alergias y las intolerancias aún no son lo suficientemente conocidas por la gente, y en especial los que se dedican a este sector deberían estar mejor informados, o al menos, sensibilizados con estos trastornos, que convierten algo tan necesario y con lo que se disfruta tanto, como es la comida, en un auténtico veneno.


PD: La foto del secreto es de Javier Serrano, artista de fotos de comida del COEX.

martes, 21 de diciembre de 2010

Tomates


Mugen: El tomate, cuando pasa del plato al pan, cambia de dimensión.

(Primavera 2009, San Martín de Trevejo)

domingo, 12 de diciembre de 2010

HANA. Diario de una Histaminósica perdía.

La Histaminosis Alimentaria No Alérgica (HANA) es un síndrome infradiagnosticado de reciente descubrimiento y que sufren muchas más personas de lo que pensamos. Sus síntomas, por separado, no alertan a nadie, ya que se trata de "molestias" que todos pensamos que hay que sufrirlas y punto. Pero cuando empiezan a exagerarse, es cuando nos damos cuenta de que algo nos pasa.

Sin embargo, cuando vamos al médico, éste nos enseña los resultados negativos de todos los análisis y nos manda a nuestra casa a que nuestra madre nos vele las migrañas o nos haga sopitas de arroz para las diarreas. Y nos aguantemos. AJO Y AGUA, que diría mi abuela. Esto ocurre en la mayoría de los casos, ya que los médicos aún no han oido hablar de este síndrome.

Algunos de los síntomas que te pueden hacer sospechar de que sufres de histaminosis (que no es más que una intolerancia a la histamina, una molécula que se encuentra en mayor o menor abundancia en todos los alimentos) son estos:

-Dolores de cabeza (jaquecas, cefaleas, migrañas) (sobre todo si son periódicas)

-Diarrea o estreñimiento crónico.

-Piel seca o atópica.

-Dolores musculares o articulares, contracturas sin razón de ser.

-Fatiga sin causa.

-Calambres musculares, calambres abdominales.

-Muchos casos diagnosticados como Fibromialgia.

-Pesadez o meteorismo tras las comidas.


Yo los reunía casi todos, y por eso me daba la sensación de que tenía treinta años más. Hace un mes me han diagnosticado de histaminósica, así que ya os iré contando cosas de mi nueva aventura.

Porque no me queda duda de que esto será una aventura...

viernes, 10 de diciembre de 2010

Viaje al Mar Rojo I



Bueno, he vuelto viva del viaje de fin de carrera. He estado una semana en el Mar Rojo, viviendo en un yate con mis amigos y buceando en aquellas cristalinas y cálidas aguas cuatro veces al día.

¡Ha sido una de las mejores experiencias de mi vida! Aún no me lo creo.

Estuvimos en el parque nacional Ras Mohamed, en el S. S. Thisthelghorm (Trigretón para los españoles...) y en millones de arrecifes de coral. Vimos nemos (peces payaso) de dos especies diferentes, rayas de puntos azules, una manta-raya, y al menos 6 o 7 tortugas. Buceamos con corrientes y nos lo pasamos genial! Es igual, igual que en la peli de Nemo.


Bucear en los arrecifes de coral a veces es como pasear por una colina, solo que los arbustos son gorgonias y corales arborescentes, negros sobre todo, o corales mesa, y en vez de andar lo que haces es sobrevolarla, y si vas en una corriente ni siquiera tienes que aletear.

Ahora, que con la noticia de la alemana muerta por un tiburón en las costas de Sharm el Sheikh, el mismo pueblo en el que hemos estado buceando nosotros, me lo pensaré dos veces para la próxima vez. Según información de primera mano, de uno de mis amigos egipcios (guía buceador de Sharm) el otro día por el "caralibro" me contó que la culpa fue de un barco de buceo que echó al mar un montón de corderos, no sé si con la intención de atraer tiburones...

Al que asó la manteca, sí señor.


Os dejo con algunas de las fotos del viaje. Ya pondré más, no sus preocupeis, que mi ordenata está en coma y sólo tengo estas...


Behind the koral!

Junto al pez cabrón, digo, león.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Los pelos como escarpias. Me da igual que sea un anuncio. Ni siquiera sé lo que anuncia. Si fuera sólo la historia...

Esto es algo que sí deberíamos ver varias veces al día, y no esas mamarracheces de la superfregona o el pajilleitor plus ese.

¡Adelanteeeeee!

lunes, 27 de septiembre de 2010

Profunda

La maldición de los oídos tontos se convirtió esta mañana en bendición... gracias a mi lentitud en compensar y bajar por el cabo, dos amiguitos pasaron a vernos... mis primeros peces luna!! (Mola mola)



La foto no es mia, sino de Buceo La Herradura. Pablo no se atrevio a fotografiarlos... Nos quedamos quietos como estatuas, agarrados al cabo, durante los diez segundos que duraría la aparición, a unos 15 m de profundidad, disfrutando del espectáculo de verlos nadar como ángeles, mientras una oblada les retiraba los parásitos, picoteando. Y luego, tan súbitamente como habían aparecido, el gran azulse los tragó.

sábado, 25 de septiembre de 2010

Nocturna


Una nocturna es lo más parecido a nadar por el espacio profundo... la oscuridad te rodea en la ingravidez, mientras las noctilucas, unos dinoflagelados que brillan cuando las agitas, llenan todo tu alrededor con diminutos destellos similares a lejanas estrellas verdosas.

sábado, 3 de julio de 2010

Becas Séneca

Mi experiencia como becaria Séneca este año:



Nenes, cuidado: pensáoslo muy mucho antes de cogeros una Beca Séneca. Os espera una ardua tarea... la burocracia es peor que en Rusia...

miércoles, 30 de junio de 2010

Root


Basado en una historia real, (aunque ella... no lo sabe)

lunes, 21 de junio de 2010

Recordando...










Recuerdo de abril
sus húmedos besos
rozando feliz
mis cansados huesos
olores intensos
ahogándome a mi… y a ti.

Jinetes de moto
de casa al trabajo
del trabajo a casa
y en medio una pausa
para descansar
un poco de vida,
principio y final,
el bar de la esquina
donde se termina
la vida real.
Tú ya no eres tú,
yo no quiero ser,
y entre copa y copa
unas ganas locas
de salir volando
al último tren.
Al cabo la noche
podía con nosotros
oculta tu rostro
que nos van a ver
bebamos el broche
y de un lado al otro
íbamos cantando
alguna canción
que nació sin alas
y aunque deformada
la recuerdo hoy.

Hoy, te busco y olvido que voy
con la lluvia siempre llorando en mi piel

Hoy la lluvia espera sentir
que tu boca beba la soledad de abril,
hoy la lluvia me habla de ti
llorando en mi piel.

A veces recuerdo
que estuve tan cerca
de andar tu camino
y cuesta creer
que un mal movimiento
desboque el destino
de nuestro ajedrez.

Rodando cadenas
termina la escena
en tu breve actuación.
La guadaña negra
se lleva tu vida
y lastra la mía
con todo su ser
hallándome rota
al dejarme caer

No, duele la soledad
ella no, ella se queda
nadie se la llevará.

Hoy la lluvia espera sentir
que tu boca beba la soledad de abril
hoy la lluvia me habla de ti,
llorando en mi piel.


domingo, 20 de junio de 2010

Información PCRN. Distribución: Libro sobre Lobbies o grupos de presión. “Conspiraciones Tóxicas”.

NOTA: Para que llegue la INFORMACIÓN al mayor nº de CIUDADAN@S, por favor, reenviar los correos de la PCRN a vuestros contactos.

Información PCRN. Distribución: Libro sobre Lobbies o grupos de presión. “Conspiraciones Tóxicas”.

Buenos días.

Los autores de Conspiraciones Tóxicas, el primer libro de investigación sobre el oscuro mundo de los lobbies empresariales que trabajan sigilosamente contra el medio ambiente, nos hemos liado la manta a la cabeza y nos hemos hecho libreros de nuestra obra dado que la editorial Planeta no parece interesada en distribuirlo y ni siquiera lo envía a librerías que así se lo han solicitado (¿la siniestra mano de algún lobby aludido actuando en los dominios de la familia Lara? ¡Quién sabe!). Nosotros, sin embargo, seguimos investigando esos temas a poca financiación que encontremos.

Si conoces alguna librería interesada en ofrecer a sus clientes literatura de investigación periodística, os agradeceremos enormemente el contacto, la verdad es que los libreros no dan precisamente facilidades para colocar obras en sus estanterías, y eso que no arriesgan nada.

Por supuesto, si estás interesado en algún ejemplar firmado y dedicado por los autores, lo vendemos nosotros mismos pero no al precio que fija la editorial (18 euros) sino a 8, más gastos de envío si no quieres recoger el libro personalmente en Vicálvaro o Canillejas, en el este de Madrid.

Tal como cuenta la cubierta del libro, “Conspiraciones tóxicas es una investigación que mide el verdadero poder de los lobbies o grupos de presión. Los autores han seguido a los reyes del ladrillo y el hormigón en España, a los impulsores de la telefonía móvil y los transgénicos, a los especuladores del agua, a los fabricantes de productos químicos, a los contaminadores del sector de la cerámica o de la energía nuclear, a quienes trafican con los bosques o a quienes impulsan megaproyectos de energías sucias... sacando a la luz sorprendentes revelaciones que no dejarán a nadie indiferente”. En Internet tenemos un buen número de reseñas, noticias y entrevistas para ampliar información. De momento, ningún grupo de presión –y citamos a unos cuantos- ha rebatido un solo dato de los que aportamos y alguno, incluso, nos ha felicitado. Trabajar para quien trabajan no está reñido con la deportividad.

Para este asunto, o para cualquier otro, puedes dirigirte a la dirección o teléfonos que figuran más abajo.

Agradeciendo de antemano tu interés por nuestro periodismo comprometido, te saluda atentamente,

Rafael Carrasco

co-autor de “Conspiraciones Tóxicas”

91 233 47 82 / 647 84 21 39

C/ Villablanca, 85

28032 Madrid

rcarrasco@agenciadossier.es

Skype: rafael.carrasco4

sábado, 19 de junio de 2010

NOTA: Para que llegue la INFORMACIÓN al mayor nº de CIUDADAN@S, por favor, reenviar los correos de la PCRN a vuestros contactos.

Radio Nacional de España. Radio-3: “Mientras el aire es nuestro” en Escribano Palustre.

Mientras el aire es nuestro (Escribano Palustre)

Puedes oírlo y descargar el programa íntegro en:

http://www.rtve.es/mediateca/audios/20100613/mientras-aire-nuestro-escribano-palustre/798357.shtml

13-06-2010

'Mientras el aire es nuestro' es el título de un documental donde se analiza desde diferentes perspectivas lo que puede suponer a la comarca de Tierra de Barros, en Extremadura, la construcción de una refinería de petróleo. En él aparecen los testimonios de personas que desde una plataforma ciudadana han unido sus esfuerzos para rechazar este proyecto. En esta edición de Escribano Palustre también hacemos de altavoz de las diferentes propuestas de cinco organizaciones ecologistas y nos acercamos a Canarias, donde con el nuevo catálogo de especies amenazadas, se desbloquean algunos proyectos portuarios paralizados por su impacto ambiental (13/06/10).

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Descarga del documental "Mientras el aire es nuestro.

LIBRE PRODUCCIONES

http://www.libreproducciones.com/Libre_Producciones/Portada.html

Puedes descargar el documental de 55 minutos de Libre Producciones "Mientras el aire es nuestro". Pincha en el cartel e inicia la descarga a través del enlace que aparece en el foro.

http://www.plataformarefineriano.es/index.php?id=146

VIDEO: Mientras el aire es nuestro

EcologistasTV, la tele de Ecologistas en Acción

http://www.ecologistasenaccion.org/spip.php?article10597

Siglo XXI: Desarrollo Sostenible

Plataforma CIUDADANA "Refinería NO"

Telf. 609 63 42 54 Fax: 924 52 36 63

www.plataformarefineriano.es www.plataformarefineriano.com

http://www.afectadosporgallardo.es/

http://jovenescontralarefineria.blogspot.com/

http://www.ciudadanosdevillafranca.es/

http://www.termicasnoextremadura.org/

e-mail: norefineria@gmail.com

viernes, 18 de junio de 2010

Marruecos I, una experiencia inolvidable. Día 1

Bueno, con un retraso de algunos meses, publico la primera de una serie de entradas que reflejarán mi experiencia en el viaje iniciático que hice a Marruecos el puente del trabajo de este año 2010.

Viernes, 30/4/2010

Nerviosa apago el despertador. Son las 2 y media de la madrugada y apenas he dormido una hora y algo, entre pesadillas de ir corriendo tras el bus y cosas así. Me levanto de un salto, ya vestida completamente, y compruebo que las dos mochilas que llevo están terminadas. Ato mi fabuloso cojín viajero (hay un abismo entre viajar con él y sin él...), compruebo mentalmente que llevo llaves, móvil y cartera, y pasaporte, y me echo ambas mochilas sobre mis hombros. Voy a pasar tres noches en las montañas de Marruecos y quiero que todo sea perfecto. Aun así, no llevo más de lo imprescindible: tres camisetas, un par de mudas, un par de pantalones, un par de botas (puestas), bastones para andar, algo de comida para el primer día (y por si la comida de allí está demasiado mal...) cámara de fotos, saco de dormir, poncho-manta, gorra y chubasquero, frontal, navaja, protector solar... y poco más.

Llego en poco más de quince minutos a los Comedores Universitarios, de Fuente Nueva donde nos espera el autobús a las casi 50 personas que componemos la expedición. En cuanto arranca, me sumo en un profundo sueño sobre mi cojín mágico, y no me despierto hasta que el bus empieza a sacudirse con las estrías de la carretera del puerto de Algeciras (bueno, miento, me desperté un par de veces con algún ronquido, pero luego el silencio volvía a ser normal, así que apenas me di cuenta. Sólo recuerdo haber tenido un pensamiento para el conductor, de lástima, porque debería sentirse muy solito conduciendo un autobús lleno de gente dormida... luego pensé que ya le habíamos pagado por ello, y se me quitó la pena) El autobús nos deja rápidamente en la terminal a las 6 y poco, donde tenemos que esperar que el ferry salga a las 7 y nos lleve a Ceuta.


Soriano nos reparte los pases y nos echamos un poco para descansar, ya que nos espera un día muy duro con la expedición en la montaña. 

Somos muchos y cuesta encontrar un sitio para todos, donde dejar los equipajes vigilados si te quieres tomar un café, pero al fin encontramos una esquina espaciosa.


Cuando voy al servicio me sorprende que los hay de dos tipos: normales (occidentales) y letrinas (orientales). Estoy nerviosa; nunca he subido a un barco (el vaporcito de la bahía de Cádiz no cuenta...), y mucho menos salido de España (Portugal tampoco cuenta, lo tengo tan cerca de mi casa que estornudo y me caigo del otro lado de la frontera). Cuando el profe nos avisa, nos ponemos en marcha hacia el embarcadero.


Por encima de mi cabeza asoma mi fiel compañero,
el fabuloso cojín viajero, que no se ha perdido ninguna de mis excursiones...

Hace fresco, y mucha humedad; el aire huele a sal, y a combusible quemado. Los pasillos y rampas que llevan a los diferentes embarques se hacen interminables. Cuando por fin embarcamos, me siento bastante nerviosa; además, no encontré la biodramina hasta que estuve sentada en mi sitio...


Amanecer saliendo del puerto de Algeciras

Cuando empiezan a rugir los motores y el barco empieza a bambolearse me parece que no voy a aguantar el viaje sin marearme. Salgo junto con algunos amigos a la miniterraza de fumadores, en parte para que me dé el aire, en parte para ver si avistamos algún bicho marino. Hay mucha niebla; en poco tiempo dejamos de ver el puerto de Algeciras. No me asusta mucho no ver nada más que agua a mi alrededor, y una niebla espesa que en poco tiempo nos dejó la piel y las gafas llenas de gotitas de agua, a parte de lo que salpicaban de por sí los motores.


Los supuestos delfines... no es que se vean muy bien...


Entre una cosa y otra, vimos algunos delfines de lejos, en la estela de espuma blanca que íbamos dejando, creo que eran listados, pero no me hagáis mucho caso. También había peces voladores que aleteaban fuera del agua y luego se zambullían haciendo que las olas se llenaran de reguerillos de espuma.

El barco subía y bajaba; el ruido de las hélices era ensordecedor, y la pequeña lluvia de agua de mar me empezaba a dar frío, así que entré para coger mi poncho y echar un vistazo a mi equipaje. Dentro el movimiento de sube-y-baja se notaba muchísimo más, así que me apresuré a volver a fuera. Y como Murphy es muy buen amigo mio, en ese momento en el que yo andaba de un lado para otro, apareció justo junto al barco una familia de delfines. Y yo me lo perdí...

Poco depués, cuando ya le estaba cogiendo el gustillo al vaivén del barco, apareció Ceuta entre la niebla. El barco empezó a bajar la velocidad y enfiló hacia el puertito.



El minipuerto de Ceuta

Al acercarnos me sorprendió ver una escultura de dimensiones colosales que se quedaba pequeña al lado de los grandes cargueros que pasaban por allí. Las columnas de Hércules.


Al desembarcar empezó la auténtica aventura...

Emocionada, empecé a hacer un repaso de lo que nos quedaba hasta llegar a nuestro destino. El siguiente paso era llegar hasta la frontera en un bus que nos había puesto el Corte Bereber (como dice Ibáñez) para pasar a Marruecos.

Y para eso son necesarios los pasaportes.

Me flaquearon las piernas y me tuve que sentar cuando recordé dónde estaba el mío.

Una nítida imagen de la noche anterior me golpeó como un bate de béisbol. El escáner de mi impresora. En Granada.

El pasaporte llevaba tres días metido en el bolsillo de la mochila donde tenía que ir. Y justo antes de acostarme decidí hacerle una fotocopia y mandarle una copia a mi madre y otra a Mugen. Por si acaso. Corren muchas leyendas sobre policías que te piden el pasaporte y luego te piden dinero para devolvértelo...

En aquel momento me pareció la mejor idea del mundo. Pero en la terminal estuvo a punto de darme un ataque.

No pasaporte, no party.

Cuando salgo y me acerco al profe, sólo con decirle que tenía algo que preguntarle me miró con ojos preocupados. Antes de abrir la boca, adivinó mis pensamientos.

-No puede ser...

Por mucho que deshiciera las mochilas, yo sabía dónde estaba. En el escáner. A más de 300 km.

Tras una llamada a nuestro protector de Tetuan, para pedirle consejo, me dijo el profesor que no había muchas esperanzas. Mientras los demás desayunaban, el profe y yo nos dirigimos en taxi a la comisaría de policía, para ver si me podían hacer otro pasaporte. Estábamos aún en territorio español; esperábamos que las cosas aún funcionaran de manera similiar, al menos.

Pero cuando llegamos a la puerta y dos maromos viejunos de uniforme, con pinta de haber participado en la invasión del Sáhara, nos impiden la entrada una vez que saben nuestras intenciones, y con gesto displicente nos dicen que no hay cita para hacer pasaportes hasta junio, nos miramos, sorprendidos, al ver tras ellos, que todos los policías visibles estaban tomandose un café, o descansando, y no había nadie más en la habitación. Realmente, no es que hubiera millones de personas hacinadas esperando su turno para un DNI o un pasaporte... como en la oficina de Granada, donde, a pesar de ello, me lo saqué en el día... y sin cita.

La realidad de aquel momento cayó sobre mí como un bloque de hormigón. Sólo sería posible hacerse un pasaporte en el momento con la técnica Camps: según mi profesor, nos costaría unos 200 o 300 euros.

Con lo cual, la posibilidad de obtener un pasaporte esa mañana desaparecía.

Desanimada, entramos en una cafetería y desayunamos. Las perspectivas no eran muy buenas para mí. Mi confianza en las autoridades, ya de por sí bastante minada, había desaparecido por completo en unos segundos. Tener que coger sola un taxi moro y llegar hasta el puerto otra vez me empezaba a dar bastante pánico, si a eso le unes que debía vigilar con cuatro ojos mis dos mochilas, riñonera, bolsillos, etc.

Mi profesor intentaba tranquilizarme mientras se tomaba un café. La última posibilidad que nos quedaba era acercarnos a la frontera, con cuidado, esperando que nuestro protector hubiera conseguido algo (lo cual era bastante improbable) Si esto también fallaba, tendría que coger allí un taxi y recorrer los 30 kilómetros que me separarían del puerto...

Mientras esperamos a nuestros compañeros de expedición en la frontera, compramos los papeles que nos pedirían en una ventanilla más adelante a un muchachito que hacía como que no se enteraba de lo que le pedíamos (50 papelitos en francés y árabe, con los formularios de los datos de a dónde íbamos de dónde veníamos, y quienes eran nuestros padres, y nuestra casa, y...)

El resto de la gente estaba ya sellando los pasaportes cuando los encontramos. Con ellos estaba nuestro protector, al que llamaré con el nombre falso de Mohamed, que resulta que tiene cierta relación con la gente de Aduanas. Este hombre me agarró con una mano del tamaño de una rueda de camión y me mandó con un moro alto y rapado, gafas de sol estilo policía setentero, traje de chaqueta, pinganillo y walkitalki, y zapatos de piel acabados en punta. Todo en él hacía pensar en un agente secreto, su gesto hosco, la manera de hablar, o más bien, gritar, en árabe-francés a otros que parecían subordinados y que no les hacía demasiada gracia lo que estaba pasando.

Me cogió el DNI, se lo guardó y me hizo una seña para que le siguiera. Cruzamos al lado marroquí, a unos barracones con ventanillas que se caían a trozos (no más que los del lado español), numeradas del 1 al 4. Antes de desaparecer por una de las puertas oxidadas, me dijo algo que yo entendí como "Ve'ala'sincco!" .

Yo miré, algo perdida, los ventanucos y la gente que hacía cola frente a ellas, despistada. ¿La cinco? ¿El moro aquél sabría decir los números en español? Sólo se veían cuatro. Se había llevado mi DNI y yo estaba perdida en el lado marroquí. Por una décima de segundo tuve pánico, pero luego algo en mi subconsciente me llamó la atención. El moro había hecho un gesto algo ambiguo cuando dijo que fuera a la 5. Como gesticulan como gitanos, yo no había hecho mucho caso de sus manos.

Decidí probar suerte y fui a donde se acababan los barracones. Al doblar una esquina, pasada la primera ventanilla, me encontré un pasillo estrecho y sucio, sin salida. En la pared del fondo había un pequeño cartel (muy pequeño) que ponía


"5. Guichet diplomatique. "

¡Bingo!

Me acerqué, aliviada. Tras un butrón en la pared de yeso (la ventanilla no podía tener otro nombre) con cristales completamente velados por la mugre, había otro moro, o el mismo, no sé, que en un pésimo español me dijo que tardaría cinco minutos, que me esperase allí.

Estaba admirando los techos de uralita del paso para automóviles y reflexionando sobre el concepto del tiempo en oriente y occidente, cuando llegó un señor gordito de cara redonda y piel negra que se puso a hablar enérgicamente con el mi moro en francés, exigiendo algo. No sé cómo lo resolverían, pero el hombre, bastante alterado, tuvo que esperar su turno.

Veinticinco minutos más tarde (o más, porque veinticinco sólo desde que empecé a mirar el reloj, cuando ya me aburría) el mi moro apareció por la esquina de los barracones con mi DNI y un papelito mágico...

-Toma. Es un pase para tres días. No lo pierdas, ten mucho cuidado. Este es tu pasaporte ahora. Si lo pierdes, te costará mucho salir del país -o al menos entendí algo parecido.

Creo que le dí las gracias en francés, en inglés y en español, y asustada y aliviada a la vez, cogí mis documentos y eché a correr hacia la parte española, donde mis compañeros, aburridos por la espera, me recibieron con gritos de alegría.

Nos pusimos en fila para pasar la frontera. Había dos policías marroquises de uniforme, con sendas metralletas colgasdas del hombro, mirando que los pasaportes estuvieran sellados. Cuando les di mi papelito mágico, la fila se paró. Un sudor frío empezó a condensarse en mi nuca, a pesar de la brisa marina. El policía miró alternativamente el papel, a mí y a su compañero, y otra vez a mí, e intercambiaron algunas palabras en francés-árabe ese que hablaban. 

El tiempo se paró. ¡Y casi también mi corazón, por cuarta vez desde que amaneció!

Finalmente, me dejaron pasar. No me lo podía creer.
¡Estaba en Marruecos!


El puesto fronterizo, desde el lado marroquí, antes de que vinieran los polis a reñirnos por echar fotos 

Tras unos cientos de metros andando por la explanada, del lado marroquí, nos esperaba un autobús que nos pagaba la Universidad de Tetuán, previa mediación de nuestro protector, para movernos por el país, ya que en alguna excursión anterior, otro año, se cometió el fallo de alquilar un bus español, de modo que cada vez que un policía veía la matrícula, los paraba, y tenían que pagarle para que no les multase o algo peor, con lo cual se les encareció un montón el viaje...

El autobús era una auténtica reliquia. Menos de veinte años no tenía.


El resistente autobús de la Universidad de Tetuán


Y cuando entramos dentro...


A pesar de las apariencias, el bus era bastante cómodo. Era muy fácil amodorrarse, incluso sin usar el cojín. Atravesamos varias urbanizaciones de la costa, tipo Marbella, pero en árabe, y vimos un palacio que nos explicó el conductor, era el palacio de verano de la mujer del rey de Marruecos.



Al rato, paramos en un pueblito con nombre español para desayunar (otra vez). Se llamaba Martil, junto al río del mismo nombre. Se notaba que empezábamos a imbuírnos del ritmo local, mucho más pausado. Esto es África. Cambiamos algo de dinero y compramos nuestros primeros productos. Yo compré una torta de pan calentito y un dulce de pistachos que se me hacía la boca agua sólo de pensar en comérmelos. El pan sabía a ajonjolí y a nuez moscada, y tenía el punto exacto de sal, no como el que se hace en Badajoz, que está soso como el solo (por ordenanza de la Junta de Extremadura...)

Continuará... aquí

domingo, 6 de junio de 2010

25 meses junto a ti: el viaje continúa

25 meses embarcados en este viaje.
25 meses viviendo aventuras.
25 meses compartidos.
25 meses regalados.
25 meses junto a tí.



Gracias por acompañarme en esta aventura.

Sin tí no habría podido llegar hasta aquí.


sábado, 5 de junio de 2010

Otra de Pérez-Reverte. LA MOCHILA Y EL CURRICULUM.

Llueve a ratos, y Madrid está frío y desapacible. Pasan paraguas al otro lado del escaparate de la librería de mi amigo Antonio Méndez, el librero de la calle Mayor. Estamos allí de charla, fumando un pitillo rodeados de libros mientras Alberto, el empleado flaco, alto y tranquilo, que no ha leído una novela mía en su vida ni piensa hacerlo -«ni falta que me hace», suele gruñirme el cabrón- ordena las últimas novedades. En ésas entra un chico joven con una mochila a la espalda, y se queda un poco aparte, el aire tímido, esperando a que Antonio y yo hagamos una pausa en la conversación. Al fin, en voz muy baja, le pregunta a Antonio si puede dejarle un currículum. Claro, responde el librero. Déjamelo. Y entonces el chico saca de la mochila un mazo de folios, cada uno con su foto de carné grapada, y le entrega uno. Muchas gracias, murmura, con la misma timidez de antes. Si alguna vez tiene trabajo para mí, empieza a decir. Luego se calla. Sonríe un poco, lo mete todo de nuevo en la mochila y sale a la calle, bajo la lluvia. Antonio me mira, grave. Vienen por docenas, dice. Chicos y chicas jóvenes. Cada uno con su currículum. Y no puedes imaginarte de qué nivel. Licenciados en esto y aquello, cursos en el extranjero, idiomas. Y ya ves. Hay que joderse.

Le cojo el folio de la mano. Fulano de Tal, nacido en 1976. Licenciado en Historia, cursos de esto y lo otro en París y en Italia. Tres idiomas. Lugares, empresas, fechas. Cuento hasta siete trabajos basura, de ésos de tres o seis meses y luego a la calle. Miro la foto de carnet: un apunte de sonrisa, mirada confiada, tal vez de esperanza. Luego echo un vistazo al otro lado del escaparate, pero el joven ha desaparecido ya entre los paraguas, bajo la lluvia. Estará, supongo, entrando en otras tiendas, en otras librerías o en donde sea, sacando su conmovedor currículum de la mochila. Le devuelvo el papel a Antonio, que se encoge de hombros, impotente, y lo guarda en un cajón. Él mismo tuvo que despedir hace poco a un empleado, incapaz de pagar dos sueldos tal y como está el patio. Antes de que cierre el cajón, alcanzo a ver más fotos de carnet grapadas a folios: chicos y chicas jóvenes con la misma mirada y la misma sonrisa a punto de borrárseles de la boca.

España va bien y todo eso, me digo. La puta España. De pronto la tristeza se me desliza dentro como gotas frías, y el día se vuelve más desapacible y gris. Qué estamos haciendo con ellos, Maldita sea. Con estos chicos. Antonio me mira y enciende otro cigarrillo. Sé que piensa lo mismo. En qué estamos convirtiendo a todos esos jóvenes de la mochila, que tras la ilusión de unos estudios y una carrera, tras los sueños y el esfuerzo, se ven recorriendo la calle repartiendo currículum en los que dejan los últimos restos de esperanza Licenciados en Historia o en lo que sea, ocho años de EGB, cinco de formación profesional, cursos, sacrificios personales y familiares para aprender idiomas en academias que quiebran y te dejan tirado tras pagar la matrícula. Indefensión, trampas, ratoneras sin salida, empresarios sin escrúpulos que te exprimen antes de devolverte a la calle, políticos que miran hacia otro lado o lo adornan de bonito, sindicatos con más demagogia y apoltronamiento que vergüenza. Trabajos basura, desempleos basura, currículums basura. Y cuando el milagro se produce, es con la exigencia de que estés dispuesto a todo: puta de taller, puta de empresa, boca cerrada para sobrevivir hasta que te echen; y si tienes buen culo, a ser posible, deja que el jefe te lo sobe. Aún así, chaval, chavala, tienes que dar las gracias por los cambios de turno arbitrarios, los fines de semana trabajados, las seiscientas horas extras al año de las que sólo ochenta figuran como tales en la nómina. Y si encima pretendes mantener una familia y pagar un piso date con un canto en los dientes de que no te sodomicen gratis. Flexibilidad laboral, lo llaman Y gracias a la flexibilidad de los cojones se han generado, dice el portavoz gubernamental de turno tropecientos mil empleos más, y somos luz y fan de Europa. Guau. Gracias a eso, también, un chaval de veintipocos años puede disfrutar de la excitante experiencia de conocer ocho empleos de chichinabo en tres o cuatro años, y al cabo verse el la calle con la mochila, buscándose la vida bajo la lluvia. Partiendo una y otra vez de cero. Flexibilidad laboral. Rediós. Cuánto eufemismo y cuánta mierda. A ver qué pasa cuando, de tanto flexionarlo, se rompa el tinglado y se vaya todo al carajo, y en vez de currículums lo que ese chico lleve en la mochila sean cócteles molotov.

domingo, 23 de mayo de 2010

22 de Mayo: Día Mundial de la Biodiversidad. Protesta por la desprotección de la biodiversidad canaria

Ecologistas en Acción protesta ante la Delegación del Gobierno de Canarias en Madrid, por la próxima aprobación en el Parlamento de Canarias de la Proposición de Ley del Catálogo de Especies Protegidas de Canarias, a propuesta Coalición Canaria y el Partido Popular. Para Ecologistas en Acción esta proposición supone la desprotección de muchas especies, carece de todo rigor científico y supone un retroceso sin precedentes en la protección de la biodiversidad.

Ecologistas en Acción ha mostrado hoy su rotundo rechazo a la Proposición de Ley que define el Nuevo Catálogo de Especies Protegidas de Canarias con la organización de una concentración de protesta ante la Delegación del Gobierno de Canarias en Madrid. Según Ecologistas en Acción, se trata de una ley hecha de espalda a la ciudadanía y a la comunidad científica y cuyo único objetivo es la de rebajar la categoría de protección a gran número de especies amenazadas, para de esta forma saltarse las trabas legales que impiden la construcción de grandes, e innecesarias, infraestructuras actualmente bloqueadas, como es el caso del Puerto de Granadilla.

Mientras existe una creciente conciencia internacional sobre la necesidad de salvar la biodiversidad del planeta, seriamente amenazada por la acción humana; mientras se celebra el Año Internacional de la Biodiversidad, declarado por la Asamblea General de Naciones Unidas; y cuando solo faltan tres días para celebrarse el Día Internacional de la Biodiversidad; el Gobierno Canario apunta en la dirección contraria, al rebajar la categoría de protección a más de la mitad de las especies actualmente protegidas.

Especial mención merece la nueva categoría “De Interés para los ecosistemas canarios” que intencionadamente se ha inventado el grupo parlamentario de CC donde se incluyen a cerca de 200 especies que solo estarán protegidas si están dentro de un Espacio Protegido, siempre y cuando, no haya un proyecto de interés público, poniendo en peligro el riquísimo patrimonio natural del archipiélago que es, además, una excepcional aportación a la riqueza medioambiental del planeta. La única justificación de esta nueva categoría es la de salvar los obstáculos legales de determinados proyectos de dudoso interés público sin tener que salvaguardar la conservación de determinadas especies incluidas en la presente categoría. Sirva de ejemplo, las desprotección de los Sebadales para construir el Puerto de Granadilla.

Como se ha puesto en evidencia en los últimos meses son muchísimas las entidades científicas que han evidenciado su rechazo al Catálogo, desde instituciones de gran prestigio a nivel mundial como la UICN, hasta entidades de ámbito estatal como el Grupo de Ecología y Evolución en Islas del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). Pero no solo son entidades científicas, destaca que, a día de hoy, 13 Ayuntamientos y 4 Cabildos (más de la mitad) canarios han aprobado mociones de rechazo a la propuesta de Ley, lo que pone aún más en entredicho la supuesta representatividad de los diputados y diputadas del Parlamento de Canarias, a la hora de votar el mayor atentado contra la biodiversidad y la democracia de la historia democrática de los últimos treinta años. www.ecoportal.net

Se puede consultar la relación de todas las entidades que se oponen al nuevo Catálogo en la página web www.nodescatalogacion.com

Fotos de la protesta: http://www.ecologistasenaccion.org/spip.php?article17605

miércoles, 19 de mayo de 2010

TODOS A FAVOR DE LA "Sociedad General de Fabricantes de Mesas"



Yo fabrico una mesa a Ramoncín, él va, me la paga y se la lleva a su
casa. Un día invita a comer a sus amigos para hacerse una cena con
jabugo, ostras, caviar de Beluga y otras delicatesen propias de un
currante como él.

Pues bueno, ¿cómo es que sus amigos están comiendo en MI mesa,
disfrutando de ella Y NO ME ESTÁN PAGANDO?.
¿Que ya la pagó en su momento Ramoncín y él hace lo que quiera con la
mesa?. ¡De eso nada!.
Yo se la vendí a ÉL y no al "amigo" Echanove que se está poniendo
ciego comiendo en mi mesa.

Así que cada vez que alguien coma en una mesa y no sea éste el que la
compró me tiene que pagar.

Pero espera, no solo eso, sino que el que saque beneficio económico de
mi trabajo (la puta mesa), lo voy a sangrar.

O sea, todos los restaurantes que me paguen 2mil€ al mes por usar mis mesas.
¿Pero por qué restaurantes solo?, TODO EL MUNDO USA MESAS: las
oficinas necesitan mesa para trabajar Y GANAN DINERO POR ELLO, los voy
a sangrar a todos.

¿Una boda?, que paguen por las mesas, ¿NO PAGAN POR LOS LANGOSTINOS?
(Ramoncín dixit).

Pero claro, hay un problema: yo antes hacía mesas, pero hace años que
no hago ni una y nadie usa una mesa mía. Pues no pasa nada, yo cobro
por TODAS las mesas. Es más, por todo lo que tenga 4 patas y una tabla
encima. Por si acaso, vete a saber si alguna de ellas es mía o de mis
amigos de la Asociación.
Pero da igual si esas mesas son de Ikea, YO las cobro y luego digo que
el dinero se lo lleva Ikea.

¿Nadie es capaz de pararle los pies a esta gente?...
Pásalo que la gente entienda, con este ejemplo chorra, lo que nos está
haciendo la SGAE a TODOS los ESPAÑOLES.
(Repito que el evento no es mío, me lo pasaron por correo pero no decía nada sobre su autor, que brillante mente!)

domingo, 16 de mayo de 2010

jueves, 13 de mayo de 2010

La supermagic towel de Bob Esponja

¿Qué haacen cinco jóvenes un martes por la noche mientras esperan a que venga la pizza?


viernes, 23 de abril de 2010

Excursión de Geobotánica al Collado del Agua y Prado Negro, en Sierra Harana, Iznalloz. 23 de Abril

Apago el despertador sobresaltada y miro la luz que brilla, azul y verde. Son las 7. Me levanto con un suspiro y me pongo los desmontables nuevos del esprinter sobre la carne de gallina. Hace más frío del que me esperaba.
Con más sueño del que puedo recordar agarro una magdalena del mueble de la cocina, y en ese momento veo en mi mano la inscripción mágica garabateada a boli: "Bocata". Me asomo al balcón e, inexplicablemnte, la croisanteri esta cerrada. No tengo pan. Un recuerdo pequeño y arrugado repta entre la neblina de mis pensamientos. Hay un pan de molde caducado, pero aun sin moho, en alguna parte. Unto las rebanadas con lo primero que pillo y le incluyo un poco de jamón. Algo que he aprendido este curso: el jamón serrano de sobre es alimento indispensable para cualquier estudiante, y mejor si es varias veces al día.

Añado los bocatas a la colección de paquetes de frutos secos y zumos que hay en el fondo de mi mochila. Prismáticos, cámara y la libreta de campo. Corro hacia los comedores universitarios a y media, y por el camino me encuentro con Marina la Biopeligrosa. Cuando llegamos al punto de encuentro, somos 5. Se supone que el bus sale a las 8, pero hasta las y media pasadas no aparece ninguno. Para entonces ya se ha juntado un grupito apañao de gente.

Intento dormir algo en el corto trayecto hasta Prado Negro, en el Parque de Huétor, pero me resulta imposible. Los paisajes son cada vez más sorprendentes. Había olvidado aquello que cuando pequeña me parecía lo más natural del mundo, cuando iba allí a pasar el día. Las montañas deben ser altas, picudas y cubiertas de árboles.

En Prado Negro bajamos del bus, que da la vuelta y se va. Enseguida nos paramos a mirar una Secuoya sempervivens que crecía al borde del camino.
Secuoya sempervivens

Empezamos a ascender campo a través, hacia una acequia que rezuma agua por la ladera, formando una comunidad de plantas llamada Adiantetea capilli-veneris que también se encuentra en laderas de agua corriente o en travertinos. Las piernas y los párpados nos pesan de sueño y cansancio; no hay muchas ganas de moverse.
Subida hacia la acequia

Formación fitosociológica Adiantetea capilli-veneris

 
Vemos especies típicas del bosque mediterráneo, aunque esté manejado por el hombre. Formación Citisetea scopario-stryati. Monte cubierto de Adenocarpus, Citisus scoparius y Retama, Cistus. Una gramínea llamativa, Festuca elegans, típica de bosques de encinas o robles. En la umbría, más Crataegus, agracejo, tomillar lavandular con Timun mastchina y Heliantemun en suelos más rocosos.
Agracejo (Berberis hispanica)


Timun mastichina (mejorana)

Encontramos Erodium rupicola en grietas de rocas, una especie fisurícola como las arenarias (cariofilaceas) de la familia de los geranios. Junto a ellas, Sedum, que aprovecha el sustrato creado por las fisurícolas, pues necesita algo más de tierra.
Erodium rupicola
Sedum
El torvisco (Daphne gnidium) es un arbusto típico de encinares, con una buena cantidad de propiedades mágicas, pues se pensaba que quitaba el mal de ojo (algunos pastores sigen confeccionando collares para sus ovejas con la corteza de este arbusto). Rakel y yo cogemos una pizquita por si las moscas.



Torvisco (Daphne gnidium)

Bajo los quejigos (Quercus faginea) encontramos Paeonia coriacea, a punto de abrir sus capullos. Yo ya las había visto en la sierra de San Jorge el año pasado, y sorprendentemente me acordé. Es una planta antigua que indica suelos maduros y profundos, típica de las sierras béticas y que crece en sustratos básicos.
Paeonia coriacea

Las plantas eurosiberianas florecen antes de echar la hoja. Entre ellas tenemos las Anemonas, Violetas, Ficaria... Litodora fruticosa es una borraginácea, también llamada "Hierba de las siete sangrías" por sus propiedades medicinales (se suponía que limpiaba la sangre...)
Ficaria ranunculoides
Litodora fruticosa
Al cabo de un rato descubrimos una orquídea, a la que todos afotamos sin parar como si fuera una estrella del pop. Ya estábamos ascendiendo hacia el Collado del Agua, en dirección al Sotillo.
Orchis purpurea

Los tejos se agarraban a los canchos de las cumbres rocosas, y me hicieron recordar leyendas de cuando era chica, un tejo que alargaba su sombra sobre el agua con malicia, pues el agua a la sombra del tejo era mortal...
Taxus baccata
Erinacea anthyllis en flor
Erinacea anthyllis
Ya en el Collado del Agua, una zona entre dos cumbres con muchísimos vientos, vemos praderas con Ionopsidium prolongum, una crucífera que viene de Grazalema, y Erinacea anthyllis (Cojín de monja) que debe su nombre a las supuestas torturas que se autoinfligían las monjas, sentándose en este arbusto tan espinoso.






Nos paramos a comer bajo una roca en la que crecían matas de Draba hispanica, similar a la llamada "Hierba del mayor dolor", de la que dicen que es mejor que la morfina.
Draba hispanica


Ya bajando encontramos un puñado de Prunus ramburus, conectados por estolones. Es una especie vicariante y rara de encontrar en estos lugares. De hecho, el profesor se paró de repente y exclamó "¿Y esto qué hace aquí?"
Prunus ramburii
Cuando van mejorando las condiciones en la ladera de la montaña, vemos la formación Ramnoprunetea. Crataegus más abundantes, Salvia lavandulifolia (indicadora de supramediterráneo, sustituye a Lavanda) junto con Convolvulus y otras del tipo arenaria.

Ya iniciamos el descenso serio en zig-zag por la ladera hacia el Sotillo e Iznalloz. Intentamos atrochar las vueltas del camino por el cortafuegos, pero resulta muy difícil, y no se tardaba menos. Las rodillas empiezan a resentirse, y el camino, lejos de acortarse, parecía cada vez más largo. Cada vuelta parecía mayor que la anterior.


Al llegar abajo, calculamos sobre el mapa que la excursión había sido de unos 18 o 20 km. Entramos en el bar, y comprobamos que a pesar de haber bajado los últimos, éramos los primeros en llegar... al llamar a los demás nos dijeron que estaban en otro lugar, así que fuimos nosotros los que les esperamos a ellos tomándonos una cervecita bien fresquita. 


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